UN JUGUETE CLÁSICO
Hoy toca hablar de
un juguete que pasa desapercibido y no precisamente por su tamaño: Los coches a pedales. Durante muchos
años los coches a pedales y sus hermanos de batería han sido el regalo por
excelencia de cumpleaños y Reyes. La ilusión de todo niño que quería jugar a
ser mayor. Actualmente el gran tamaño de estos vehículos y el reducido espacio
de las casas de hoy, han relegado a este juguete a un capricho, olvidando casi
por completo su fantástica historia como juguete estrella, aunque grandes
jugueterías los expongan en enormes espacios y sigan apareciendo en las últimas
páginas de los catálogos de juguetes de Navidad.
Personalmente recuerdo perfectamente cuando unos Reyes Magos me dejaron entre Playmobil, Tragabolas y la última tirada de Madelman, una alucinante moto militar Harley Davidson de batería (con truco, porque llevaba 2 ruedines ocultos en la parte trasera). La estrené en el Parque de Atracciones de Madrid, entre las bocas abiertas de los niños y el asombro de los padres que paseaban por el Parque. Yo más estirado que un ocho y más contento que con zapatos nuevos (que por otra parte no me ponen nada contento) ¡Gracias Reyes Magos! ¡Gracias Papá!
“Los modelos más populares fueron el Citroënett 5HP,
Ford Mustang, Ford T, el Jeep, coches de bomberos, etc.”
Estamos
totalmente seguros que muchos de nuestros seguidores guardan fotos de su coche
o moto de pedales o batería, porque era un juguete muy especial. Si buscáis un
poco de la historia de los coches de pedales no dejaréis de sorprenderos. Su
origen es muy antiguo por lo que se puede considerar un juguete clásico, en
competencia con las muñecas de porcelana y los soldaditos de plomo, e
indudablemente su historia va en paralelo con la historia del automóvil, pero
debido al alto precio del coche de pedal, el juguete se limitó a los niños de
familias ricas, nada extraño para los juguetes clásicos de 1.900. El diseño de
estos coches era impresionante, no había nacido el plástico por lo que un cuerpo
de acero moldeado hacía de carrocería, el chasis en madera y las ruedas de
goma. Es decir, el aspecto de un coche real a escala.
(… Recuerdo perfectamente cuando unos Reyes Magos me dejaron entre Playmobil, Tragabolas y la última tirada de Madelman, una alucinante moto militar Harley Davidson…)
Cincuenta años más
tarde los coches de pedales experimentaron una renovada popularidad, replicando
a los modelos de verdad. Además iban accionados por cadena e incluyendo accesorios
como luces, frenos, parabrisas, capotas apertura del capó para motores
simulados, etc. Así, los modelos más populares fueron el Citroënett 5HP, Ford Mustang, Ford Modelo T, el JEEP, coches de
bomberos, de carreras, etc. Y sin duda, su gran rival fueron y son las bicicletas y triciclos, y no tenemos
que decir quién va ganando la batalla de ventas, porque en belleza y estética
está muy claro.
Aunque la industria
norteamericana era la originaria en este tipo de juguetes con marcas como American National, Gendron, Steelcraft,
Garton y Toledo Wheel, entre otras, existieron varias empresas en Francia,
Italia e Inglaterra que lanzaron varias obras de arte por diseño y
originalidad. España no se quedó atrás y se convirtió en una potencia mundial
en coches de pedales de juguetes, como en muchos otros juguetes. Clásicos de
acero estampado con una estética maravillosa y una construcción repleta de
detalles de calidad. Más que fabricantes fuimos artesanos de los coches a
pedales, destacan marcas como: F.
Sauquillo, La Vasco Dianense-fábrica de juguetes, Vicente Fons y muchos
otros, a los cuales les dedicaremos una entrada para ellos solos. Un poco de
paciencia.
En Murcia tenemos
un sorprendente museo: MUSEO DE CARTAGO
http://www.museocartagocoleccion.org/ Donde se puede disfrutar de una gran
variedad de coches a pedales europeos y americanos, además de otros muchos
juguetes históricos y de colección. El museo cuenta con una visita virtual y
tenemos que decir que es de las mejores que hemos podido encontrar en Internet,
una visita de verdad, en la que se puede ver con detalle cada uno de los
salones del museo, con algunos de los elementos más importantes.
¡Imprescindible!
Comentando que
íbamos a publicar esta entrada, nuestro amigo Marcos, gran coleccionista y
dueño de El Rincón del Juguete Antiguo,
nos comentó que guarda un gran coche a pedales clásico. Dicho y hecho, aquí
tenéis las fotos para disfrutar de la gran pieza de Marcos, y por otro lado, os
invito a visitar su tienda-museo en las redes sociales o seguirle por las
distintas ferias a las que acude por España, porque estoy seguro que
recordaréis muchas de las piezas que posee con gran cariño.
Sin duda los coches
a pedales se han convertido en juguetes de colección, elevando muchísimo más su
ya de por sí alto precio de origen, para coleccionistas adinerados que posean
grandes espacios para guardarlos. En el jardín de una casa pueden quedar de una
forma espectacular. ¡Qué envidia sana! Para otros, coleccionistas, aficionados
y curiosos de otras joyas más pequeñas, se han convertido en un vínculo
emocional entre el presente y el pasado, cuando el pasado no era mejor, pero
jugábamos a todo y con todo.
AMM
El Juguete de mis Sueños
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